Estuve pensando en tus manos, tus manos que son como un talismán...
Estuve pensando en tu sonrisa, tu sonrisa que me hace estallar...
Saber que la felicidad no se puede comprar,
y no la pude encontrar sin tus manos, sin tu sonrisa,
sin tus brazos que me amarran como ligas.
Me quema tu calor, me hipnotiza:
Pensar en tu sonrisa como luna creciente,
nada y nada hasta meterse en mi mente...
Color púrpura, sangre de mi torrente,
no sé si hay forma porque eres fuente...
Toda va cambiando:
Cambia el camino andado,
cambian las caras que he mirado.
Cambia mi sonrisa:
Se va transformando en una mueca de ira contra el cambio...
Sin pensar tal vez que no existiriamos si no hubiesemos cambiado!
Pasa el tiempo que es tormento,
y me hace dejar atrás los momentos.
La mente errabunda camina sin descanso en tu vereda de luna,
en tu sonrisa nocturna, no hay día que me haga feliz...
Busco la noche, me oculto del día,
porque es el momento en que puedo ver tu sonrisa.
La felicidad se oculta y brilla a la luz de la luna, las estrellas titilan en el infinito espacio, que está tan limitado...
Mi imaginación no descansa, tiene destellos, algunos atropellos, tiene infinito enredado en sus lapsos de momentos...
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